Una voz en medio de la crisis hondureña

Cuando llego a mi casa y me olvido por un instante de la política y la campaña de los pro Zelaya y Micheletti no hago nada más que escuchar esta canción "Heal the World" que en medio de la adversidad ha dado paz a mi corazón.



Su letra es hermosa y aunque de niña la escuché jamás me había detenido a entenderla. Michael Jackson nos regaló un himno a la paz que desafía las fronteras físicas y mentales en una humanidad que cada vez creo es más inhumana.

En momentos me he sentido rara por estar viviendo esta etapa de la historia que me muestra una Honduras poralizada tanto por el miedo y la búsqueda de justicia. Sé que no me gustaría ser de ningún extremo, pero es triste salir a las calles y encontrarse afirmaciones: "o estás conmigo o no estás con nadie". La crisis social y política que estamos viviendo es tan extrema que a veces hay personas que en vez de decir hola preguntan: ¿Fue golpe o no fue golpe?

En momentos me cuestiono si los que no estamos con nadie contamos porque he llegado a pensar que soy una pequeña voz que navega en aguas turbulentas. Ya me cansé de escuchar los argumentos de la “verdad o ilegalidad” ambas partes creen que los hondureños no pensamos.

Hay políticos que hablan que no hay condiciones para una guerra civil, cuando los escuché pensé que NO, pero al detenerme analizar me cuestiono si realmente ¿seremos capaces de tolerar a los amig@, vecin@, compañer@, amantes? O que se yo. Creo que mis pensamientos seguirán nadando en medio de la basura cibernética antes que mis preguntas tengan respuesta. No puedo seguir escribiendo porque hasta las palabras se me han acabado...

El cambio de discurso de Mel Zelaya

Ni “Golgoreti” ni “Palmerolo”

Si he sido una estúpida por dejarme guiar por los ideales de Morazán y la libertad de Bolívar. Sí, me equivocado al creer que sólo con el trabajo y el esfuerzo se pueden alcanzar los sueños. Pero gracias a esas metidas de pata ahora tomé la decisión de no ser más la idiota que los políticos quieren que sea.

Hoy ni “Golgoreti” o “Palmerolo” guiarán mis pasos. Me cansé de su discurso gastado y falta de seriedad con que abordan los problemas de mi Honduras. Sí mi Honduras en donde nací y tengo enterrado mi obligo en mi amada San Pedro Sula no soy patriota ni pretendo serlo. Hoy por disque defender una postura hasta me enfadé con mi madre, después de que nos dijimos hasta de lo que nos íbamos a morir, llegué a la conclusión que Basta Ya de mentiras.

Los hondureños no necesitamos más promesas vacías y “líderes patriotas’’ que buscan a través de sus mensajes persuadirme. Nunca creí en Obama me cegué por Hillary y ahora reconozco que están cortados con la misma tijera. Que si Chávez tiene el valor de contar en público una de sus diarreas o que Lugo es la comidilla por sus múltiples romances ya no me importa. Me cansé de seguir cada uno de los capítulos de sus reality show baratos que cada vez se vuelven una mala copia de "Betty La Fea". No tengo necesidad de salir a la calle para sentir el sufrimiento y miedo que tenemos miles de hondureños que estamos en vilo a diario por no saber en lo que terminará esta crisis política. Si algo me queda de esto es darme cuenta en dónde estoy parada.

“Los pobres son muchos y es difícil de olvidarlos”: Roberto Sosa