domingo, 1 de agosto de 2010

19 años sin ti y aún te llevo conmigo

Te fuiste una madrugada de domingo y todavía tengo en mi mente tu partida. No te pude decir adiós ni darte ese último beso que me hubiera acompañado estos 19 años sin ti.

Ya no soy la niña de siete años que dejaste un 18 de mayo. Hoy cumplirías 55 años y verías a tu primogénita hecha una mujer. Mamá cuenta que fuiste la primera persona que me vio nacer. Ese miércoles de julio no sólo te convertiste en padre sino también en mi partero. Siempre me cargabas a tu lado como muestra de tu mayor orgullo.

¡Cuánta falta me has hecho papá! No sé si soy lo que soñabas, pero tu ausencia me ha hecho fuerte y tolerante. Gracias a que no estás a mi lado me he vuelto una activista en la lucha contra el VIH-SIDA y de la comunidad de LGTB, Lesbianas, Gays, Heterosexuales y Bisexuales. También he aprendido a valorar las pequeñas cosas y ponerme en los zapatos de los demás.

Recuerdo el día que me miraste y preguntaste: ¿te gusta ese par de sandalias? Por pena te conteste que no, pero tu empatía te hizo ver más allá y sin pensarlo me las comprastes. Siempre he estado rodeada de hombres que se llaman Roberto, pero tú fuiste el primero que me dejó para buscar su camino fuera de este mundo.

Tu esposa Marina junto a tus hijos, Beto y Mercy, nietos, Sebastián, Mariana, y yo esperamos algún día volver a estar juntos. Mientras eso pasa te dedico esta hermosa canción que me hace sentirme más cerca de ti porque aunque tú no estés aquí yo te llevo conmigo.